El discurso completo de Capriles Radonski frente al CNE: “Se va a acabar la división entre chavistas y escuálidos”
Henrique Capriles Radonski se postuló hoy de forma oficial ante el Consejo Nacional Electoral (CNE) como candidato presidencial a las elecciones de el próximo 7 de octubre. Justo antes de entrar a la sede principal del ente comicial pronunció un discurso al país, frente a sus seguidores congregados en la Plaza Caracas, en el municipio Libertador de la ciudad capital.
A continuación la transcripción del discurso completo:
¡Qué viva Venezuela, qué viva! Los tiempos de Dios son perfectos. ¡Aquí estoy, Venezuela, cómo te quiero, Venezuela! Saludos desde aquí, desde esta Plaza Caracas a todo nuestro pueblo, con la imagen de nuestro Libertador allá atrás.
Quiero saludarlos a todos, a todos los que hoy salieron a caminar por la esperanza, por el futuro, por la Venezuela grande, por la patria grande. ¡Qué viva Venezuela!
Hoy salieron como un millón de personas, un millón de personas.; más de un millón de personas, más de un millón de corazones. Los tiempos de Dios son perfectos; no olvidemos nunca este día. Hoy vinimos todos a firmar un compromiso y nuestro compromiso se llama Venezuela, ¡Venezuela!
Miren, mucho hemos caminado, mucho nos hemos esforzado para estar hoy aquí. Hemos aprendido mucho, hemos trabajado mucho, hemos trabajado para decirle hoy a Venezuela que sí podemos construir un país grande, unido. Hoy estoy aquí por el mandato de nuestro pueblo, hoy soy candidato porque el pueblo así lo decidió y el 7 de octubre seré el próximo Presidente de todos los venezolanos. ¡Cómo te quiero, Venezuela!
Yo quiero que hoy quede claro para todos los venezolanos: yo no aspiro ser el Presidente de un grupo, no aspiro ser el Presidente de un sector; yo quiero ser el Presidente de todos los venezolanos, de todos. Sí podemos; yo no soy enemigo de nadie, yo soy enemigo de los problemas, yo soy enemigo de la violencia, yo soy enemigo de un país que tiene todo para avanzar pero tiene un Gobierno que no nos permite avanzar, tiene un Gobierno que nos ha dividido. Yo les quiero decir a todos, a todo nuestro pueblo que nos está viendo: Capriles va a unir a Venezuela, ¡Capriles va a unir a los venezolanos, Capriles va a hacer de Venezuela la Venezuela tricolor!
Yo he llegado hasta acá siempre con el apoyo del pueblo, nunca le he quedado mal al pueblo y hoy le digo a toda nuestra Venezuela y a nuestro pueblo: prohibido fallar, prohibido. Esta es una generación que está comprometida con el futuro de Venezuela y nadie nos va a negar esa oportunidad. Pasamos años de pelea, de conflictos; pasamos años de pelear entre nosotros. Hoy queda un solo sector que quiere que continuemos peleando. Yo no quiero más peleas en Venezuela, yo quiero la unión de todos; aquí lo digo delante de nuestro Libertador, delante de nuestro pueblo: ¡vamos a unir a Venezuela, cueste lo que cueste!
Este no es el proyecto de este servidor, este es el proyecto de los que sueñan con una Venezuela sin violencia, este es el proyecto de los que sueñan con el futuro, este es el proyecto de los que sueñan con una Venezuela para vivir todos en paz. Solo no puede Capriles, Capriles necesita los 28 millones de venezolanos, Capriles los necesita a todos.
Qué Dios las bendiga a todas ustedes, ustedes van a salir de allí a una vivienda, qué Dios las bendiga y a sus familias (dijo, mirando a un grupo de damnificadas que se encontraban en un edificio adyacente a la plaza).
Miren, yo he recorrido este país casa por casa, corazón por corazón, de verle a los ojos a nuestro pueblo, de vernos a los ojos; los venezolanos tenemos que vernos a los ojos, cuando nos vemos a los ojos nos vemos la luz . He recorrido este país casa por casa y les digo algo: no tengo duda, ninguna duda que el 7 de octubre le vamos abrir la puerta al futuro a nuestra Venezuela. Yo les quiero a todas esas mujeres, a todos esos hombres que nos hemos dado la mano, que nos hemos abrazado, que hemos conversado, yo estoy con ustedes, yo quiero a este país por encima de cualquier cosa; mi vida es Venezuela, mi vida son ustedes, ¡mi vida es el pueblo!
Luego de Dios están ustedes, yo quiero ser el primer servidor público de este país, yo estoy al servicio de ustedes, no ustedes a mi servicio. El otro candidato nos plantea una Venezuela dividida, Capriles les plantea una Venezuela unida. El otro candidato plantea una Venezuela de violencia, Capriles les plantea una Venezuela de paz, una Venezuela de tranquilidad. El otro candidato les plantea que se pongan la franela de un color, yo les planteo que se pongan la franela de la Vinotinto, la Venezuela tricolor.
El otro candidato nos plantea que la suerte de Venezuela depende de él, Capriles les plantea que la suerte de Venezuela dependerá de lo que hagamos todos, con Capriles a la cabeza pero con el esfuerzo y el compromiso de todos. El otro candidato nos plantea que veamos al pasado, Capriles les plantea que se monten en el autobús del progreso que va hacia el futuro. Así que hoy, después de 10 kilómetros, aquí estoy, gracias a ustedes, gracias a nuestro pueblo y quiero que hoy salgamos de aquí pensando en lo grande que va a ser Venezuela, pensando que en este proyecto no hay espacio para el odio, pensando que en este proyecto no hay espacio para la venganza, pensando que en este proyecto no hay espacio para las listas; en este proyecto tiene que haber espacio siempre para el amor, para el encuentro, para el diálogo, para el abrazo.
El 7 de octubre vamos a decidir no entre dos hombres, vamos a decidir entre dos opciones de vida; el 7 de octubre vamos a decidir entre un presente estancado, violento, sin oportunidades o quienes creemos que hay un futuro de progreso para todos. Yo quiero que salgamos de aquí pensando en el futuro, yo quiero que salgamos de aquí pensando en nuestros hijos, en nuestras esposas, en todos. Salgamos de aquí pensando que lo que pase en Venezuela dependerá de cada uno de nosotros, pensando que este país sí tiene futuro, pensando que este país sí puede echar pa’ lante y sobretodo pensando que a este país lo vamos a unir. Venezuela va a amanecer el 8 de octubre unida y ahí va mi mensaje, ahí va mi mensaje en los que piensan distinto a mí: yo sí quiero ser su Presidente, yo también quiero ser el Presidente de los rojos y voy a ser el Presidente de los rojos también.
Mi experiencia como gobernante me ha dicho, me ha mostrado que cuando se quiere, se puede. Mi experiencia me ha dicho que cuando un pueblo quiere buscarle solución a sus problemas, no hay obstáculo que lo detenga. Así que cómo dice acá (agarró una bandera tricolor con el mensaje “hay un camino”), Venezuela, nuestro pueblo, ¡hay un camino y juntos tenemos la fuerza para recorrer ese camino!
Quiero agradecerles a todos, quiero agradecerles a todos, desde aquí a todo nuestro pueblo su cariño, su afecto. Voy ahora a inscribir la candidatura de la vida, del progreso, de la esperanza, del futuro. ¡Cómo te quiero, Venezuela!
Salgamos todos de aquí y regresemos a nuestras casas y abracen a sus hijos y díganles: hijo, con Capriles y con todos hay un camino; hijo, hijo, Capriles no odia a nadie, Capriles ama a Venezuela; hijos, con Capriles se va a acabar la división entre chavistas y escuálidos. No hay dos Venezuelas, amigos, hay una sola Venezuela que es esta, esta es ¡Esta es, esta es la única! (dijo, agarrando su franela de la selección nacional de fútbol). Una sola Venezuela.
Saquemos de aquí adentro la división, no hay; el poder no es para dividir, el poder es para unir, el poder es para trabajar y lo más importante: el poder es para servir. Así que le quiero decir a toda nuestra Venezuela: hoy doy un paso más para la victoria del 7 de Octubre.
Venezuela, estoy a tu servicio; pueblo, este flaquito está a tu servicio. Qué Dios bendiga a Venezuela, que Dios bendiga a esta patria, que Dios los bendiga a todos. ¡Sigamos adelante, que nada nos detenga! ¡Amén!
¡Qué viva Venezuela, qué viva! Los tiempos de Dios son perfectos. ¡Aquí estoy, Venezuela, cómo te quiero, Venezuela! Saludos desde aquí, desde esta Plaza Caracas a todo nuestro pueblo, con la imagen de nuestro Libertador allá atrás.
Quiero saludarlos a todos, a todos los que hoy salieron a caminar por la esperanza, por el futuro, por la Venezuela grande, por la patria grande. ¡Qué viva Venezuela!
Hoy salieron como un millón de personas, un millón de personas.; más de un millón de personas, más de un millón de corazones. Los tiempos de Dios son perfectos; no olvidemos nunca este día. Hoy vinimos todos a firmar un compromiso y nuestro compromiso se llama Venezuela, ¡Venezuela!
Miren, mucho hemos caminado, mucho nos hemos esforzado para estar hoy aquí. Hemos aprendido mucho, hemos trabajado mucho, hemos trabajado para decirle hoy a Venezuela que sí podemos construir un país grande, unido. Hoy estoy aquí por el mandato de nuestro pueblo, hoy soy candidato porque el pueblo así lo decidió y el 7 de octubre seré el próximo Presidente de todos los venezolanos. ¡Cómo te quiero, Venezuela!
Yo quiero que hoy quede claro para todos los venezolanos: yo no aspiro ser el Presidente de un grupo, no aspiro ser el Presidente de un sector; yo quiero ser el Presidente de todos los venezolanos, de todos. Sí podemos; yo no soy enemigo de nadie, yo soy enemigo de los problemas, yo soy enemigo de la violencia, yo soy enemigo de un país que tiene todo para avanzar pero tiene un Gobierno que no nos permite avanzar, tiene un Gobierno que nos ha dividido. Yo les quiero decir a todos, a todo nuestro pueblo que nos está viendo: Capriles va a unir a Venezuela, ¡Capriles va a unir a los venezolanos, Capriles va a hacer de Venezuela la Venezuela tricolor!
Yo he llegado hasta acá siempre con el apoyo del pueblo, nunca le he quedado mal al pueblo y hoy le digo a toda nuestra Venezuela y a nuestro pueblo: prohibido fallar, prohibido. Esta es una generación que está comprometida con el futuro de Venezuela y nadie nos va a negar esa oportunidad. Pasamos años de pelea, de conflictos; pasamos años de pelear entre nosotros. Hoy queda un solo sector que quiere que continuemos peleando. Yo no quiero más peleas en Venezuela, yo quiero la unión de todos; aquí lo digo delante de nuestro Libertador, delante de nuestro pueblo: ¡vamos a unir a Venezuela, cueste lo que cueste!
Este no es el proyecto de este servidor, este es el proyecto de los que sueñan con una Venezuela sin violencia, este es el proyecto de los que sueñan con el futuro, este es el proyecto de los que sueñan con una Venezuela para vivir todos en paz. Solo no puede Capriles, Capriles necesita los 28 millones de venezolanos, Capriles los necesita a todos.
Qué Dios las bendiga a todas ustedes, ustedes van a salir de allí a una vivienda, qué Dios las bendiga y a sus familias (dijo, mirando a un grupo de damnificadas que se encontraban en un edificio adyacente a la plaza).
Miren, yo he recorrido este país casa por casa, corazón por corazón, de verle a los ojos a nuestro pueblo, de vernos a los ojos; los venezolanos tenemos que vernos a los ojos, cuando nos vemos a los ojos nos vemos la luz . He recorrido este país casa por casa y les digo algo: no tengo duda, ninguna duda que el 7 de octubre le vamos abrir la puerta al futuro a nuestra Venezuela. Yo les quiero a todas esas mujeres, a todos esos hombres que nos hemos dado la mano, que nos hemos abrazado, que hemos conversado, yo estoy con ustedes, yo quiero a este país por encima de cualquier cosa; mi vida es Venezuela, mi vida son ustedes, ¡mi vida es el pueblo!
Luego de Dios están ustedes, yo quiero ser el primer servidor público de este país, yo estoy al servicio de ustedes, no ustedes a mi servicio. El otro candidato nos plantea una Venezuela dividida, Capriles les plantea una Venezuela unida. El otro candidato plantea una Venezuela de violencia, Capriles les plantea una Venezuela de paz, una Venezuela de tranquilidad. El otro candidato les plantea que se pongan la franela de un color, yo les planteo que se pongan la franela de la Vinotinto, la Venezuela tricolor.
El otro candidato nos plantea que la suerte de Venezuela depende de él, Capriles les plantea que la suerte de Venezuela dependerá de lo que hagamos todos, con Capriles a la cabeza pero con el esfuerzo y el compromiso de todos. El otro candidato nos plantea que veamos al pasado, Capriles les plantea que se monten en el autobús del progreso que va hacia el futuro. Así que hoy, después de 10 kilómetros, aquí estoy, gracias a ustedes, gracias a nuestro pueblo y quiero que hoy salgamos de aquí pensando en lo grande que va a ser Venezuela, pensando que en este proyecto no hay espacio para el odio, pensando que en este proyecto no hay espacio para la venganza, pensando que en este proyecto no hay espacio para las listas; en este proyecto tiene que haber espacio siempre para el amor, para el encuentro, para el diálogo, para el abrazo.
El 7 de octubre vamos a decidir no entre dos hombres, vamos a decidir entre dos opciones de vida; el 7 de octubre vamos a decidir entre un presente estancado, violento, sin oportunidades o quienes creemos que hay un futuro de progreso para todos. Yo quiero que salgamos de aquí pensando en el futuro, yo quiero que salgamos de aquí pensando en nuestros hijos, en nuestras esposas, en todos. Salgamos de aquí pensando que lo que pase en Venezuela dependerá de cada uno de nosotros, pensando que este país sí tiene futuro, pensando que este país sí puede echar pa’ lante y sobretodo pensando que a este país lo vamos a unir. Venezuela va a amanecer el 8 de octubre unida y ahí va mi mensaje, ahí va mi mensaje en los que piensan distinto a mí: yo sí quiero ser su Presidente, yo también quiero ser el Presidente de los rojos y voy a ser el Presidente de los rojos también.
Mi experiencia como gobernante me ha dicho, me ha mostrado que cuando se quiere, se puede. Mi experiencia me ha dicho que cuando un pueblo quiere buscarle solución a sus problemas, no hay obstáculo que lo detenga. Así que cómo dice acá (agarró una bandera tricolor con el mensaje “hay un camino”), Venezuela, nuestro pueblo, ¡hay un camino y juntos tenemos la fuerza para recorrer ese camino!
Quiero agradecerles a todos, quiero agradecerles a todos, desde aquí a todo nuestro pueblo su cariño, su afecto. Voy ahora a inscribir la candidatura de la vida, del progreso, de la esperanza, del futuro. ¡Cómo te quiero, Venezuela!
Salgamos todos de aquí y regresemos a nuestras casas y abracen a sus hijos y díganles: hijo, con Capriles y con todos hay un camino; hijo, hijo, Capriles no odia a nadie, Capriles ama a Venezuela; hijos, con Capriles se va a acabar la división entre chavistas y escuálidos. No hay dos Venezuelas, amigos, hay una sola Venezuela que es esta, esta es ¡Esta es, esta es la única! (dijo, agarrando su franela de la selección nacional de fútbol). Una sola Venezuela.
Saquemos de aquí adentro la división, no hay; el poder no es para dividir, el poder es para unir, el poder es para trabajar y lo más importante: el poder es para servir. Así que le quiero decir a toda nuestra Venezuela: hoy doy un paso más para la victoria del 7 de Octubre.
Venezuela, estoy a tu servicio; pueblo, este flaquito está a tu servicio. Qué Dios bendiga a Venezuela, que Dios bendiga a esta patria, que Dios los bendiga a todos. ¡Sigamos adelante, que nada nos detenga! ¡Amén!
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